domingo, 6 de abril de 2014

Juzgar los libros

Tenemos una mala costumbre, que es juzgar antes de conocer. No importa si es un libro, una ciudad, una cultura o una persona, siempre tenemos que opinar a primera vista. ¿Qué es lo que sucede con esto? Pues que muchas veces nos equivocamos por anticiparnos.
Juzgar a un libro por su portada o por su título en ocasiones puede ser malo porque puede ser que la historia de dentro sea buena.
¿Qué es lo que busca un niño? En lo primero que se fija es en la portada, las imágenes que aparecen, si hay colores apagados o vivos y si aparecen cosas interesantes, que le gusten. Después de mirar eso, pasan muy rápido por las páginas interiores, para ver si hay dibujos o en otros casos para leer un pequeño fragmento.
Es importante que cambiemos esta concepción. Lo que deberíamos de enseñar es que a un libro no se le puede juzgar por la portada, que hay que leer un poco e informarse sobre el libro. Si hacemos eso podemos conseguir leer libros que jamás hubiésemos imaginado leer.
Un ejemplo sería "LA GRAN FÁBRICA DE PALABRAS"

La portada no llama la atención, son colores apagados y parece que vaya ha ser una historia triste. Esto es erróneo, sucede todo lo contrario. Es una bonita historia de amor entre niños, que muestran que a veces no por saber mucho o tener mucho vocabulario se transmite todo aquello que se necesita. A veces, con cuatro palabras y una mirada sincera no se necesita nada más, todo está dicho. 

¿Os a pasado alguna vez esto?

No hay comentarios:

Publicar un comentario